Neza y sus Toros: una historia sin final feliz
- avilescarlos5
- Apr 22, 2021
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Durante la década de los 90, las miradas de los aficionados al futbol en México se pusieron sobre el Estadio Neza 86 con el surgimiento de un equipo de culto: Toros Neza. Aquel equipo mexiquense llenó el balompié mexicano de buen futbol y añadió también una dosis de magia e irreverencia que hicieron que mucha gente empatizara con ellos más allá de la comunidad nezatlense.
El equipo astado hizo de debut en la Primera División en la temporada 1993-94 y le bastaron un par de años para asentarse como un equipo sólido y competitivo. Su era de mayor éxito llegó coincidió con el cambio de temporada a torneos cortos, una época donde los Toros comenzaban poco a poco a dominar los primeros lugares de la tabla con Enrique Meza dirigiendo un equipo plagado de figuras como Antonio Mohamed, Pablo Larios, Germán Arangio, Rodrigo Ruíz, Nidelson De Melo, entre muchos más.
Siendo un completo espectáculo antes, durante y después de cada juego, el cuadro burel logró llegar a la final del Torneo Verano 97, instancia donde se mediría ante el Guadalajara, el equipo más ganador del futbol mexicano hasta ese entonces y que llevaban por mote “Super Chivas”. La mesa estaba puesta para Neza y sus Toros hicieran historia y sellaran su punto más alto con el primer campeonato profesional para la ciudad.
El partido de ida en el Coloso de la Avenida Lázaro Cárdenas fue una gran exhibición del equipo rojo ante los rojiblancos, pero que terminó sufriendo de más y rescatando el empate en los minutos finales. La vuelta tenía que ser mejor aún, los errores no estaban permitidos en la que sería su cita con el destino; penosamente para la afición de la ciudad del Rey Poeta, ocurrió todo lo contrario. El juego en el Estadio Jalisco fue una fiesta de goles para el Rebaño Sagrado que se llevó el triunfo por un contundente 5-1 en el marcador parcial y 6-2 en el global.
Posiblemente, esa goleada catastrófica fue un presagio de lo que estaba por venir. Los Toros se fueron quedando sin sus mejores elementos, empezando por los pilares Enrique Meza y el “Turco” Mohamed. El equipo poco a poco iba descendiendo lugares en la clasificación con el pasar de las jornadas y torneos, su caída era inevitable que ni siquiera el astro brasileño Bebeto fue capaz de salvar y su llegada al Estado de México simplemente fue el último clavo al ataúd.
Finalmente, Toros Neza terminó por descender a la entonces Primera División “A” del futbol mexicano en el año 2000. Por un par de años, el equipo de la ciudad del “Coyote hambriento” hizo todo lo posible por regresar al máximo circuito, incluso llegando a la final del Verano 2001 donde perdieron ante La Piedad y, seis meses más tarde, el equipo simplemente desapareció. Aquella institución que enamoró a los aficionados al futbol con sus máscaras al salir al campo y la alegría con la que jugaban dentro de este, ya no estaba más.
Pasaron días, meses y años sin que Ciudad Nezahualcoyotl tuviera futbol profesional en su mítico y mundialista Estadio Neza 86. Fue hasta el año 2010 que se anunciaba el nacimiento de unos nuevos Toros que buscarían regresar la alegría a la afición nezatlense. Una década después de haber descendido, Neza FC nacía en una mudanza de franquicia más en el futbol mexicano; un equipo de Grupo Salinas que con una imagen totalmente renovada quería ganarse a la afición de Ciudad Neza.
Era un equipo que usaba el color rojo, que se teñían el cabello, usaban máscaras, eran goleados o goleaban, no había puntos medios. Sin usar formalmente el nombre de “Toros Neza”, pero con una esencia similar, el Neza FC se ganó con creces el cariño de los aficionados y puso de nuevo las miradas de todos en este municipio del Estado de México, ahora dentro de la Liga de Ascenso MX.
Una historia prácticamente similar a la de su antecesor pues el nuevo cuadro burel en pocos años se hizo presente en los primeros lugares, incluso en su primer año estuvieron cerca de llegar a una final. El amor y pasión de la gente de Neza por el futbol jamás se fue, simplemente entró en coma hasta la espera de una nueva institución que los hiciera despertar. Un equipo que tal vez no tenía los nombres de peso como en los 90, pero con hombres como Rodrigo Prieto, Ever Guzmán, Miguel Fraga, Rodolfo Vilchis, Diego Mejía, Emmanuel Loeschbor y muchos más lograron conectar con la afición.
En el año 2013, concretamente en el Torneo Clausura, el equipo se adentró en un huracán de polémicas e incertidumbre. Su inicio de torneo no fue el mejor, el DT en ese entonces, Carlos Bustos, dejó al equipo a medio torneo para tomar al Morelia en Liga MX y los rumores sobre que el equipo sería vendido cada vez se escuchaban más. Sin embargo, la afición nezatlense nunca abandonó y se mantuvo al pie del cañón.
El equipo sabía que no los podía defraudar y a falta de tres jornadas para culminar la fase regular, lograron meterse a liguilla con tres triunfos consecutivos y un gol en tiempo de compensación, después, el resto es historia. El conjunto astado hizo historia al ganar sus seis partidos de liguilla y alzarse, así como el campeón del Torneo Clausura y poniendo ahora la meta en la Final de Ascenso.
Para dicha instancia, los dirigidos por Roberto Hernández se enfrentarían a nadie más y nadie menos que su némesis: La Piedad. Así es, el equipo que hace 12 años había privado de regresar a primera y que terminó por el ser el final de los míticos Toros Neza volvía a aparecer, ahora ante una nueva franquicia pero que tenía los mismos sueños y aspiraciones del club y de sus aficionados.
Aquella final de revancha parecía cambiaría su historia, pues en la ida obtuvieron la victoria por la mínima diferencia. El escenario estaba puesto, Ciudad Neza fue un carnaval la tarde del 18 de mayo de 2013, pero la tragedia volvió a ocurrir. La Piedad ganó el partido de vuelta y llevó la serie hasta los penales donde también ganaron y, una vez más, la afición de nezatlense vio a Óscar “El Tico” Rojas arrebatarles un trofeo más 12 años después. Y para rematar, Grupo Salinas anunció que venderían al equipo un par de semanas más tarde. La historia se volvía a repetir.
“Aquel que no conoce su historia está condenado a repetirla”, es una frase célebre de la cual su verdadero origen sigue siendo incierto hasta la fecha, aunque comúnmente se le atribuye a Napoleón Bonaporte. Una frase reflexiva sobre el presente y futuro que está por venir con base en lo hecho en nuestro pasado. En Ciudad Nezahualcoyotl, parece que esta es una frase hecha a la medida cuando hablamos del futbol profesional en el municipio.
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