La semana santa, una más en el calendario

Alberto Figueroa

El tiempo parece pasar volando cuando los días son casi siempre iguales, cuando el ritmo de la vida no puede llevarse con normalidad(,) pero tampoco puede detenerse. Las fiestas, reuniones, salidas y rituales, esos pequeños momentos de desprendimiento de la cotidianeidad (COTIDIANIDAD) son hoy recuerdo y anhelo para quienes han pausado distintas actividades en su vida(,) ante la situación de Covid-19 que afecta al mundo, y que ya suma más de 2.9 millones de muertes.

Y en la Semana Santa, la vida de algunos católicos en la Ciudad de México se ha detenido, pues iglesias como Nuestra Señora De Guadalupe(,) de un barrio de la colonia Juan Escutia en Iztapalapa, a la que acude la familia de Lourdes Lechuga(,) año con año en estas fechas, permanece solitaria, y parece que hasta las vírgenes y santos que en ella habitan(,) mantienen su sana distancia y alientan a familias a quedarse en casa.

“Yo soy creyente y sé que Dios está con nosotros, pero también pienso que Dios dice: ayúdate que yo te ayudare (AYUDARÉ), y prefiero cumplir con mis creencias y tradiciones desde casa”, comenta Lourdes Lechuga, quién (QUIEN SIN ACENTO) con el fin de acatar las medidas de prevención de Covid-19(,) este año decidió “esperar a que todo pase”(. CUIDA EL USO DEL PUNTO Y SEGUIDO, HACES IDEAS MUY LARGAS), y por lo tanto no acudir a las celebraciones religiosas católicas de la Semana Santa en la iglesia Nuestra Señora De Guadalupe, ya que teme por su salud y la de su familia.

Lourdes y su familia, la familia Figueroa Lechuga, intentaron cumplir con sus tradiciones de Semana Santa sin salir de su hogar, sin embargo, fue difícil y distinto. (ESTAS LÍNEAS NO APORTAN EN LO ABSOLUTO). En la sala no hay procesiones ni el tradicional Vía Crucis, en el comedor no hay representaciones de la crucifixión de Jesús, y en la cocina no es posible encontrar a un cura ofreciendo misa. La única forma de estar presentes en las celebraciones es a través de transmisiones en vivo en internet, pero la familia pierde el interés.

Este año, la Semana Santa se volvió una más en el calendario para la familia. “Fueron días como cualquier otro. No salimos ni el jueves ni el viernes santo como normalmente hacemos, no fuimos a la iglesia, no nos visitaron nuestras tías después de las procesiones. Lo único que pude hacer fue descansar de las clases en línea”, comentó Antonio Figueroa, el tercer hijo de la familia.

La única tradición que no se detuvo para los Figueroa Lechuga fue la de cocinar pescado durante los llamados Días Santos, pues de acuerdo con (las) la tradición católica, durante estos días es preferible no comer carne roja y sustituirla por platillos con ingredientes como el pollo o el pescado.

Pero hasta el pescado de este año sabe diferente(,) debido a los estragos de la pandemia, pues la comida de la familia Figueroa Lechuga en semana santa (Semana Santa, CON MAYÚSCULAS) solía acompañarse de un ingrediente irremplazable: la presencia de la abuela paterna. Sin embargo, este año no están sus pausadas risas, ni el intenso olor a su perfume, ni el labial rojo que siempre maquillaba sus labios, pues desde el pasado 10 de junio del 2020(,) partió como una de las víctimas del Covid-19.

“Este año no tenemos a mi mamá comiendo con nosotros después de la procesión del viernes santo. Definitivamente el Covid nos ha cambiado la vida por completo, y nos ha quitado momentos y personas especiales”, mencionaba el padre de la familia, José Figueroa, mientras recordaba con nostalgia las vacaciones de semana santa del 2019, cuando todo era muy diferente.

La familia Figueroa Lechuga terminó la Semana Santa con una esperanza, la de que el próximo año las cosas vuelvan a ser como antes de la pandemia de coronavirus, pues en las noticias ya se anuncia el lento avance de la campaña de vacunación contra Covid-19 en México. Sin embargo, puede que la vida retome su rumbo, pero las pérdidas que ha dejado el Covid en la familia difícilmente se recuperarán.

ALBERTO,

MUY BUEN TRABAJO. TE COSTÓ INICIAR Y QUE EL RELATO TOMARA UN REALCE, PERO LO RESACATAS A BUEN MOMENTO Y COMIENZAS A DARLE FORMA.

TU PRINCIPAL PROBLEMA ES EL USO ADECUADO DE LA PUNTUACIÓN. PRINCIPALMENTE CÓMO DEJAR DE LADO LAS IDEAS ALARGADAS CON COMAS Y CENTRARTE EN LAS FRASES CORTAS CON PUNTOS Y SEGUIDOS. TIENES QUE TRABAJAR MÁS EN ESO.

ESTÁ BIEN QUE LOS NOMBRES, LUGARES Y DESCRIPCIONES SEAN INFORMACIÓN EN SÍ, PERO HAY QUE BUSCAR INCORPORAR MÁS DATOS DEL CONTEXTO GENERAL PARA QUE LAS HISTORIAS TENGAN REPRESENTATIVIDAD EN ÉL.

CAL: 9