top of page

Adiós al mítico 10 argentino

  • pablorodriguezmart7
  • Apr 16, 2021
  • 2 min read


25 de noviembre del 2020, miércoles por la mañana en Argentina, Johny Espósito, sobrino de Maradona, y su asistente entran a despertar al astro argentino, pero no responde, inmediatamente llaman a una enfermera y a la psiquiatra, tratan de realizar maniobras de RCP, sigue sin responder, llaman una ambulancia, incrementan las acciones para hacerlo reaccionar, pero ya es tarde, Diego Armando Maradona ha fallecido.


Durante la tarde de ese mismo día circula la noticia, en Argentina nadie lo cree, piensan que solo es una recaída de sus múltiples problemas de salud, creen que se puede tratar de una “fake news”. Mientras tanto, medios de todo el mundo confirman la noticia, Maradona ha muerto a los 60 años.


Después de la autopsia, una ambulancia lleva el cuerpo del astro argentino hasta la funeraria. Durante el recorrido, vecinos salen a las calles para despedirlo entre aplausos. De igual forma, automovilistas se detienen cerca para despedirse de su ídolo. Al mismo tiempo, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, decide decretar duelo nacional de tres días por el sensible fallecimiento de Maradona.


Mientras su familia y gente cercana a Maradona se encontraban en el velatorio, en la Plaza de Mayo se encontraba una multitud de personas que esperaban la apertura al público del velatorio, gritos de “gracias, Diego” se hacían escuchar. Entre la multitud, la barra de Boca Juniors se hacía notar por sus cantos y fuegos artificiales. Una vez logró entrar el público, todo fue una locura, el amor y la pasión por su ídolo desbordaba, no querían dejar solo al mítico argentino.


Era jueves, y después de dar por terminado el velorio por el caos que causó la multitud que quería despedirse, era momento de llevar el cuerpo de Maradona para su entierro en el cementerio “Jardín Bella Vista”, que se encuentra en los alrededores de Buenos Aires y donde, también, están enterrados los restos de sus padres.


El féretro de Maradona llegó al cementerio escoltado por motos policiales que ensordecían con sus sirenas, además de camionetas que cargaban arreglos florales para su entierro. A su alrededor, vecinos despedían al argentino entre cantos y gritos; “olé, olé, olé, Diego, Diego…” era lo que se escuchaba.


La ceremonia de entierro fue totalmente intima, esto a petición su familia. Su féretro llegó envuelto con una bandera de Argentina, era el momento, el cuerpo de Maradona sería enterrado. El sacerdote dijo unas pocas palabras, breves pero concisas. El silencio, por primera vez, se apoderó del lugar. Todo había terminado, este era el último adiós a Maradona. Aquel campeón del mundo en México 86 se iba de la mano de Dios.

Recent Posts

See All
Dos balazos y adiós al futuro

Yair Cardiel. Se escucha una moto acercarse, después, cinco disparos, nuevamente se escucha la motocicleta esta vez alejándose. Un grito...

 
 
 

1 Comment


Mario Becerril
Mario Becerril
Apr 20, 2021

Pablo, me vi tentado a poner 8 a tu crónica, pero creo que hay buenos elementos para mejorar la nota.


En primer lugar te comparto los errores que encontré. Son muy pocos, pero el segundo y el cuarto me parecen los más importantes.


  1. "solo" (Falta tilde en la primera "o").

  2. "El sacerdote dijo unas pocas palabras, breves pero concisas". (¿Y qué dijo el cura? Yo creo que si estas CALIFICANDO de "breves y concisas" sus palabras es porque escuchaste o, más bien, te documentaste al respecto. Si no es así, creo que estás modificando la realidad y entiendes que eso no es correcto. Si lo pones, incluye al menos una frase).

  3. "Maradona", le decían "El Pelusa", "El 10", "Diego, E…


Like

© 2021 por Report UNAM 

bottom of page